Skip to main content

¿Quién Mató la AEE?


            Nuestros políticos nos quieren hacer creer que los malvados en esta situación de crisis son los unionados que no quieren ‘sacrificarse’ como lo están haciendo ‘todos los demás’. Nos quieren hacer creer que los ‘jugosos’ bonos y beneficios - que esos mismos políticos le otorgaron por contrato - es el origen del problema. Si los unionados doblan el lomo todo se resuelve. Si la idea es todos sacrificarse ¿por qué el gobernador no renuncia a su salario? Ya que le pagan todo, chefs, mozos, la compra y el ‘Dry Cleaner’. Le pagan el carro, el chofer, los gastos de viaje, mensajería, ama de llaves y el celular.

            Si el gobernador fuera una persona seria, echaría su sueldo al ruedo, los primeros 100 mil en sacrificio para entonces retar a ‘todos los demás’ que aporten. Lo mismo con los legisladores que por voto ciudadano mayoritario se les ha exigido una legislatura unicameral y la creación del legislador ciudadano, sin sueldo. ¿Y? ¿Cuál es el sacrificio que están aportando ellos? Pero, los empleados unionados ¡sí se tienen que sacrificar! ¡Cueste lo que les cueste!

            La verdad, hoy día indiscutible, es que la Autoridad de Energía Eléctrica está en bancarrota, igual que el país, por causa de los sueldos de lujo de los altos ejecutivos nombrados por los mismos políticos, la paupérrima administración, el recurrir a préstamos para tapar rotos, la corrupción interna y el ya afamado ‘Cartel del Petróleo’. Está clarísimo que la bancarrota no fue provocada por el bono de $1,000 y otros beneficios que reciben los empleados unionados.

            Si tenemos todos que sacrificarnos, el pueblo junto a los unionados,  ¿por qué no reducen los salarios de ejecutivos de gobierno a la mitad, de un promedio de $100,000 al año a la mitad: $50,000? Lo mismo con los legisladores, todos a la mitad del sueldo. Quizás de esa forma podemos estar más confiados en que los que buscan trabajar para el gobierno o en la política, sea porque quieren servirle al país, no para servirse del país. 

Comments

Popular posts from this blog

¿Cómo se dice: ver televisión o mirar la televisión?

            Nunca había pensado que ver la televisión fuera una experiencia, de la forma en que se habla de la experiencia de ir al cine. Hasta ahora, que me veo obligado a tomar una decisión monumental. ¿Corto el cable y boto la cajita? ¿Para acogernos a los tiempos modernos con Netflix y Amazon, VOD, DOD, Youtube, Video Streaming, etc., y economizar en gastos? O ¿sigo amarrado al cable con los 500 canales dónde nunca hay nada que ver?             Los argumentos son obvios. El cable/satélite provee un sin fin de canales y eventos, mientras el ‘streaming’ provee un sin fin de temas instantáneamente disponibles. Después de leer sobre las posibles configuraciones que incluye antenas exteriores, grabadora de video programables, internet, proveedores, y etc., tuve que aceptar que en realidad el cable/satélite se puede eliminar sin una pérdida mayor. Lo que inmediatamente me puso a pensar en esa pérd...

La Puerca de Juan Bobo

Llevo un rato viendo propiedades residenciales a la venta por un millón o más de dólares, apartamentos de cuatro habitaciones y la misma cantidad de estacionamientos. La primera reacción que me viene a la mente es: ¿cuántos millonarios hay en la Isla para pagar tanto apartamento de lujo? Claro, al ver que siguen vacios me doy cuenta que no es aquí donde están esos millonarios. Me entero, por la prensa, que la teoría de mercadeo que ha respaldado ese tipo de desarrollo es que los millonarios de otros lares van a llegar en manadas para arrebatarle esas propiedades a los desarrolladores. Y pienso yo, esos desarrolladores, ¿habrán tenido la experiencia de vivir en algún complejo de viviendas millonarias en alguna parte? ¿Sabrán por conocimiento propio lo que buscan esos millonarios? ¿O será que se lo están inventando? Algo así como “Si yo fuera rico…”. Lo que me recuerda la puerca de Juan Bobo. Desde niño cuando primero escuché a mi mamá usar la frase “parece la puerca de Juan Bobo”, pen...

La Llamarada Enciende La Pantalla

          Hace poco más de una década el programa dramático Lucy Boscana de WIPR-TV levantó la cabeza y demostró lo que son capaces los artistas y técnicos del patio. Revolución en el Infierno (2004) estableció el parámetro de calidad en la producción de televisión para la Isla. Al fin, 12 años más tarde, el canal vuelve a levantar la cabeza. Pero esta vez embiste.           La producción se titula La Llamarada , novela del afamado escritor boricua Enrique Laguerre, que todos conocimos en la escuela. Adaptada para la pantalla por Roberto Ramos-Perea, el dramaturgo puertorriqueño de mayor importancia y trascendencia internacional desde René Marqués.           La adaptación resume de una manera sencilla y fluida la complicada trama de la novela. Pero más importante aún es que al finalizar las dos horas de proyección quieres ver más. Quieres saber más de la historia...