Llevo
la firme esperanza de que durante esta temporada de campañas políticas las
tiendas que venden tela se busquen un buen dinerito adicional. Lo que observo
hasta el momento es que estas campañas van a gastar mucha tela. En esencia, se han
dedicado a sacar trapos al sol y tirar toallas. No que piense que esté mal.
Para lo que se ofrece a nivel de ideas…
Otra
vez más se le suman a las viejas ideas de campaña política donde se trata de
sobornar al pueblo tapando los rotos en las carreteras, regalando la transportación
pública, eximiendo a algunos del IVU y mucho, pero mucho, baile, botella y baraja.
Lo
que sí ha quedado demostrado en lo que va de campaña es que el que tiene el
techo de cristal no puede estar tirando piedras.