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¡La recesión viene! ¡La recesión viene!

Hay palabras que suenan complicadas pero que son sencillas de entender. Tal como ‘Recesión’. Suena a que te quitaron el recreo como castigo. “¡Y tampoco puedes comer la merienda!”, gritó la maestra. Pero es simple, recesión significa que se te acabaron los chavos para los antojos. La Depresión es distinta, depresión es que te quedaste sin chavos para la comida. Comida hay, para lo que no hay, son los antojos. OK.

Aquella artesanía que compraste una vez para una prima de Nueva York, un paisaje de flamboyanes pintado en tronco de madera barnizado, este año se quedó sin regalo. O sea que pa’ las fiestas de San Sebastián ¡¿no sobra nada?! Eso es recesión. ¿Por qué es que nos quiere asustar el gobierno con una recesión si no firmamos la cuenta para el otro préstamo de $500,000,000.00? ¡Porque es verdad! ¡Coño!

Si tú no le compras al artesano, el artesano no le puede comprar al bodeguero, y si el bodeguero no vende sus habichuelas, no puede comprar una nevera mas grande, y si la fabrica no vende lo que fabrica, tiene que des-emplear a sus empleados, y si estos se quedan sin empleo… Entonces sí que no hay pa’ la comida.

Ni los Estado Unidos, ni Canadá, ni América latina, ni la Unión Europea, ni el continente de Asia, tiene una recesión. La nuestra, podemos decir con orgullo, es “Made in Puerto Rico”, gracias a nuestros astutos lideres.

El impuesto compuesto ¿tendrá algo que ver?

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