La Terapia de Pepe Orraca

Cuando el gobierno te da algo ‘regalao’ es porque alguna traba trae. Los descuentos para envejecientes en la transportación pública fue lo primero que me levantó sospechas. Te digo. Entre las edades de 60 a 70 años el ciudadano tiene derecho a un 50% de descuento en la AMA, el Metrobús y el Tren Urbano. Si sacamos números descubrimos el truco. El pasaje de tren vale $1.50 e incluye el transbordo en AMA $0.75, o sea el costo real del pasaje y transbordo es de $0.75. Ahora viene la tarjetita de viejito. El pasaje en tren sale en 75 centavos, pero no incluye el transbordo. Unos 35 centavos adicionales. O sea, el descuento de 50% es solo de un 20% APR. Y eso que todavía no han regalao na. Repitamos los números ahora con la AMA gratis. El pasaje de tren sigue costando $1.50 pero al ser gratis la AMA, desaparece el descuento o beneficio del trasbordo gratis. O sea, el pasaje de $1.50 sigue costando $1.50 pero sin beneficio alguno. Eso si, sí vas a Río Piedras entonces tienes que montarte en

En esta y las próximas publicaciones voy a ir exponiendo me plan de gobierno. Hoy propongo la Ley del Respeto y la Confianza. Esta ley está dirigida a restablecer la posición del empleado de gobierno a lo que fue en una época: un Servidor Público. La propuesta incluye la reubicación de todos los servidores a posiciones donde todos ejerzan una función práctica. O sea, que tengan algún trabajo que realizar. (Se van moviendo de agencia y de plaza hasta encontrar en que lugar mejor puede funcionar. Así nadie se queda sin trabajo, pero todo el mundo tiene algo que hacer.) Que se promueva y premie la creatividad, la innovación, y la productividad entre los servidores públicos. O sea, que si alguien se inventa como mejorar el sistema o se pone a trabajar fuerte no se le castigue con el rechazo y la ignominia. Que los administradores (políticos nombrados) sólo tengan una función protocolaria. O sea firmar papeles (preaprobados por los técnicos de la agencia), hacer conferencias de prensa, otro

¡Esto es lo más grande! La guagua y la lancha ¡GRATIS! Por pura coincidencia los cuatro meses en que se va ofrecer el servicio gratuito coinciden con los meses de campaña. No en enero del ‘09. Ahora, la semana que viene. Si alguien piensa que esto es pura politiquería, pues tiene razón. Es politiquería de la mejor. Hasta yo me beneficio. Quién critique este gesto politiquero es porque no tiene que viajar en guagua para llegar al trabajo. Ir y venir cuesta $1.50. Si le añades el almuerzo, ir a trabajar te cuesta $7.50. O como una hora y media del día de trabajo. En otras palabras, aunque trabajes el día entero (8 hrs.) sólo te ganas el salario de 6 ½ hrs. Con la guagua gratis te ganas prácticamente una hora y pico de trabajo a la semana. $1.50 x 5 = $7.50 Pero en enero regresamos a las interminables esperas bajo el sol o la lluvia que es peor, con la AMA en un mayor déficit que en la qué está. Lo que hace falta y lanzo el reto, es que todos los candidatos a posiciones electivas utilicen

En nuestra Isla el Mal ya cumplió los cien años y no queda cuerpo que lo resista. Sabemos cuales son los males que nos aquejan. Este desastre lo llevamos tejiendo por casi una generación. Sabemos también qué esta situación de desgobierno no le cuesta ni un sólo centavo a ningún político. La cuenta la terminamos pagando nosotros, la gente que trabaja. Estos cien o doscientos líderes, con su astucia, se han asegurado salarios y beneficios muy por encima del asalariado promedio. Han creado mecanismos de perpetuidad para sus posiciones y partidos. Se han protegido de todo mal. Y este desgobierno que vivimos lo han creado por ‘el bien del partido’. No importa cual partido, el partido es supremo. Todo es aceptable si es por el bien del Partido. Sabemos que cualquier propuesta que venga de nuestros astutos líderes, no importa la etiqueta que le pongan, es pura politiquería. Por eso yo propongo una solución sencilla sin dolores ni revoluciones que se fundamenta en lo obvio, lo justo y lo neces

Mantuve el silencio durante estos meses como una penitencia con la esperanza de que sucediera un milagro y la cosa se arreglara. Tampoco me pegué en la lotería. En vista de que nuestros astutos lideres en sus guerras tribales le han dado muerte al Bien Común me doy cuenta que no puedo rehuir de la inescapable responsabilidad que me adjudica la vida. Me siento obligado a lanzar mi candidatura a la gobernación de la Isla. Dado que no pertenezco a partido alguno - no porque no he tratado, es que ninguno me quiere - el único camino que me queda es la alternativa manual o el ‘write-in’. Sé qué esto me pone en franca competencia contra otros candidatos con mayores recursos pero mi sentido patriótico me obliga. Es fácil. Escribes Pepe Orraca , mi nombre, en la 5ta columna de la papeleta para la posición de gobernador. Simple. En las próximas columnas voy a publicar mi Plan de Rescate Integrado para Puerto Rico o PRIPR. Un plan para rescatar la salud mental, económica y política de nuestra Is